Municipio de Viña del Mar aprueba ordenanza para sancionar el transporte de desechos hacia vertederos clandestinos

El municipio de Viña del Mar aprobó una Ordenanza que es fundamental para la regulación del transporte, traslado o depósito de basuras, desechos o residuos de cualquier tipo en la comuna, lo que permitirá sancionar severamente a quienes infrinjan esta disposición con multas que pueden llegar hasta las 150 UTM, equivalentes a aproximadamente 7 millones de pesos.

La nueva normativa, elaborada por el Departamento de Servicios del Ambiente, permitirá aplicar la modificación a Ley de Tránsito, 20.875 que entró en vigencia en noviembre del año pasado.

Patricio Moya, director del Área de Operaciones y Servicios del municipio, destacó la importancia de esta normativa: “Esta ordenanza permitirá que los Juzgados de Policía  Local  puedan sancionar cualquier denuncia de vecinos que sorprendan o detecten a personas inescrupulosas que botan desechos, lo que  se podrá poner en conocimiento de este hecho a las municipalidades, a Carabineros de Chile o a la autoridad sanitaria, quienes remitirán los antecedentes al Ministerio Público o a los tribunales competentes, según corresponda”

Agregó que las personas podrán acompañar fotografías, filmaciones u otros medios de prueba que acrediten el lugar, la patente del vehículo o el día en que sucedieron los hechos. “Además, no sólo sanciona al conductor, sino que también se podrá castigar al generador de los escombros”, manifestó. 

La Ley, que eleva las sanciones actuales de 5UTM hasta 150UTM, considera además la suspensión de licencias de conducir hasta por dos años y retiro de circulación de vehículos en caso de reincidencia.

La ordenanza permitirá realizar una efectiva fiscalización y control de la generación, transporte y disposición de escombros y residuos que afectan severamente todos los espacios urbanos de la comuna, principalmente cerros, quebradas y esteros, provocando graves problemas sanitaros, obstruyendo y afectando todo el sistema de aguas lluvias, que puede  generar condiciones de vulnerabilidad para la propagación de incendios forestales, lo que para una ciudad con las condiciones topográficas de Viña del Mar resulta esencial.